Una de nuestras actividades principales, con la que se inicia el Centro de Desarrollo es el Autoconocimiento:
¿Quién soy?
¿Cómo me expreso? ¿Cómo me comunico? Ser capaz de responder estas tres
preguntas con confianza es esencial para una vida llena de significado.
El tema
central es la exploración de los tres niveles de conciencia que, como seres
humanos, deberíamos dominar si queremos vivir la vida y no que la vida nos viva
a nosotros.
El primer
nivel, “¿quién soy?”, trata sobre conectarte con tu yo interior para entender
que eres valioso, que has de ser compasivo contigo mismo y comprender tus
habilidades, cualidades y necesidades. Si llegas a este nivel de compasión,
entonces todo fluye, y los defectos se convierten en virtudes maltratadas, A
veces, aquello que consideramos un rasgo negativo de nosotros mismos termina
siendo lo que los demás aprecian más. La vida nunca es blanca o negra.
El segundo nivel,
“¿cómo me expreso?”, trata sobre comprender que cada momento de nuestra vida es
una oportunidad para mostrar quiénes somos y dar lo mejor de nosotros. Cuando
estamos en armonía con nosotros mismos y con las personas de nuestro entorno
vivimos en un estado de plenitud en el que fluimos y que nos proporciona
bienestar y felicidad.
El tercer
nivel de conciencia es “¿cómo me comunico?”. La comunicación no es simplemente
un intercambio de información: va más allá de establecer contacto entre
personas. Es un desafío, porque te cuestiona sobre lo que piensas o sientes. La
buena comunicación,, es la transmisión de conocimiento con intención de
provocar la reflexión.
El
autoconocimiento es una habilidad muy importante para el liderazgo. ¿Cómo
podemos liderar equipos de personas si no nos conocemos a nosotros mismos?
Cultivar nuestra dimensión interior nos lleva a la claridad de pensamiento, al
autoconocimiento y a la buena gestión.
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